CRECIENDO

Cuenta la leyenda, que al ver DIOS la oscuridad en el mundo y el sufrimiento que acaecía a las almas encarnadas, decidió crear un Querubín mediante el cual portar su luz al mundo. 

Creó Dios a un ser tan luminoso, puro y bello, que podía convivir en presencia de Dios, se dice que Dios estaba tan maravillado, que incluso le otorgó poder para utilizarlo en su presencia. Le dio el nombre de Luzbel o Portador de la Luz (la Luz de DIOS).

Pero el  radiante Luzbel, al darse cuenta de sus asombrosas cualidades, comenzó a creer que no necesitaba a Dios, pensaba que de hecho él con tanta luz y poder: ya era todo un Dios… por lo que Dios comenzó a ser un problema, hasta el punto de creer, que podía decidir; hacer las cosas mejor que Dios y al llenarse su corazón de oscuridad, comenzó a planear sutilmente
en contra del altísimo… 

 

Pero DIOS creador conoce el corazón de todas sus creaturas y rápidamente supo que Luzbel planeaba en su contra. No sabía Luzbel que DIOS era su sustento y simplemente DIOS dejó de sostenerle: Luzbel  se precipitó meteóricamente hacia el Oscuro Abismo.

En la inmensidad de DIOS, miríadas de ángeles, en diferentes esferas, veían caer desde lo más alto, aquel luminoso ser, envuelto en oscuridad, a su paso lloraban amargamente semejante caída…

 un ser tan bello, tan pleno de luz…
tan válido en la batalla contra la oscuridad… 

desterrado al abismo…: ahora en el bando contrario.   

 

Y aún desde el abismo se le oye gritar:

“PREFIERO SER REY EN EL INFIERNO, 
QUE SERVIR EN EL CIELO !!”

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 Es en esencia lo que en la "New Age" se le está llamando EGO, 

es la  misma "entidad" que engañó a Eva en el paraíso:

 “si coméis del árbol del bien y del mal seréis como Dioses” 

Y la misma que trató de engañar de forma similar a Moisés y a Jesús en el desierto:

“Si te postras ante mí te haré rey sobre el mundo”

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Y la gran diferencia es esta:

Moises 4:1-4 : "Existió desde el principio; y vino ante mí, diciendo: Heme aquí, envíame a mí. Seré tu hijo y redimiré a todo el género humano, de modo que no se perderá ni una sola alma, y de seguro lo haré; dame, pues, tu honra. Pero, he aquí, mi Hijo Amado, que fue mi Amado y mi Escogido desde el principio, me dijo: Padre, hágase tu voluntad, y sea tuya la gloria para siempre. Pues, por motivo de que Satanás se rebeló contra mí, y pretendió destruir el albedrío del hombre que yo, Dios el Señor, le había dado, y que también le diera mi propio poder, hice que fuese echado abajo por el poder de mi Unigénito; y llegó a ser lucifer, sí, el diablo, el padre de todas las mentiras, para engañar y cegar a los hombres y llevarlos cautivos según la voluntad de él, sí, a cuantos no quieran escuchar mi voz.
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Oh alma amada, 

esta entidad es la misma 

que en este preciso instante 

te sumerge en una eterna adolescencia
rebelde, arrastrandote hacia 
los placeres del mundo
y la soberbia...

impidiendote sentir

el perfecto e inagotable Amor de Dios 

en tú corazón. 

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